viernes, 7 de marzo de 2008
Mas Recursos de Capacitación
Mas, de los que yo utilizo, al menos...
Decía Landrú en Tía Vicenta: “Cuando se encuentre en un callejón sin salida, no sea idiota, salga por donde entró”.
Hay un cuento de Luis Landrisina que ilustra muy bien esta idea de que las cosas que uno utiliza sirven para uno, no necesariamente para todos...:
En la pampa, sobre un camino de tierra, un paisano estaba tomando mate en la puerta del rancho. En eso se estaciona un auto importado, muy grande, muy caro. Se baja un señor bien vestido y le dice al paisano:
Dígame, buen hombre, ¿me puede indicar dónde está la estancia El Gallo?
El paisano chupa del mate y le contesta:
¿El Gallo? El Gallo... El Gallo... El Gallo... Mire, yo salgo tan poco que, El Gallo, por acá... No sabría decirle.
Es que tiene que ser por acá, porque me dijeron que saliera del kilómetro doscientos quince a la derecha y que después manejara veinte minutos por camino de tierra y que me la iba a encontrar enseguida, y ya hice quince minutos, así que...
¿El Gallo? Nooo, El Gallo por acá no...Yo salgo tan poco que... No le sabría decir...
Mire, la tiene que conocer. Es la hacienda de los Rodríguez Alzaga, que el viejo Rodríguez fue diputado.
¿Rodríguez Alzaga? ¿El Gallo? Nooo, por acá no... ¿Diputado? No, que yo sepa, no.
¿Y algún vecino, por acá, para preguntarle?
No, por acá no, esto es un descampado... ¿Por acá, vecino? No tengo visto. Yo salgo tan poco... que la verdad que vecino, lo que se dice un vecino, por acá, no. ¿El Gallo me dijo?
Sí, Rodríguez Alzaga, diputado.
No, por acá... No le sabría decir.
Está bien, no se preocupe. ¿No sabe dónde puedo encontrar una estación de servicio?
¿Estación de servicio? Usted dice... ¿donde se le pone gasolina a los tractores?
Sí, una estación de servicio.
No sé... Por acá, estación de servicio... Como yo no tengo tractor, ¿vio? Estación de servicio, por acá, no... ¿Un vecino me dijo que buscaba? No, por acá, no... ¿Rodríguez Alzaga? ¿El Gallo? No le sabría decir, mire. Porque yo siempre estoy por acá, no salgo Bueno, está bien, no se preocupe. Dígame cómo llego al pueblo y yo ahí pregunto.
¿Pueblo?
Sí, un pueblo.
Usted dice... con casas...
¡Un pueblo!
Mm... No le podría indicar, mire, porque yo salgo tan poco... Una vez fui a un pueblo, cuando era muy chiquito, con mi tata; yo tenía cinco o seis años y me llevó a un lugar con casas y una plaza y... Pero no sabría decir le por dónde es, porque yo no salgo casi, ¿vio? ¿El Gallo me dijo? ¿Rodríguez Alzaga? ¿Estación de servicio? ¿Vecino? La verdad que, por acá, no...
Bueno, está bien, veo que no me puede ayudar. Dígame cómo vuelvo a la carretera y yo de ahí me arreglo
¿Carretera?
¡No, viejo! —le dice el tipo. ¡Pero usted!... ¡No puede ser! Le digo de los Rodríguez Alzaga, no los conoce;
El Gallo, ¡no lo conoce! ¡No sabe dónde hay un vecino! ¡No sabe dónde hay una estación de servicio! ¡No sabe llegar al pueblo! Y ahora le pregunto por la ruta, ¡y no sabe llegar a la ruta! ¡Pero usted es un ignorante, un tarado, usted no sabe nada, usted es un idiota!
Y el paisano le contesta:
Mire, puede ser que yo sea un idiota, pero acá, el que está perdido es usted...
(tomado de "La autoestima al egoismo", de Jorge Bucay
Foto NASA
Anthony de Mello
Laguna Schmöll. Foto Adriana Diaz
Muchas veces, para poder dar clases, utilizo recursos de metáforas y frases de otros que ayudan a simplificar la idea. Uno de los que me provee muchísimas ideas es Anthony de Mello, les acerco algunas de las que mas me gustan.
"Recibir un agravio, no significa nada, a menos que uno insista en recordarlo"
"Una Mujer había presentado ante la policía una denuncia por violación...
- Puede usted describir al agresor? - pregunto el oficial
- Bueno, para empezar, era idiota -
- Dice usted idiota? - preguntó el oficial
- Si !, eso he dicho. No tenía ni idea, Y tuve que ayudarle !!-
Las risas se acallaron cuando el Maestro añadió... siempre que os sintais ofendidos, mirad si no habéis ayudado al ofenso...
Aquello suscitó un rumor de protestas... por lo que el maestro prosiguió: Acaso puede alguien ofenderte si te niegas a admitir la ofensa?"
"Cuando hablas de la Realidad, dijo el maestro, intenta expresar con palabras lo Inexpresable, de manera que lo mas seguro es que tus palabras no se entiendan. Del mismo modo, las personas que leen esa expresión de la Realidad que llamamos "escrituras" se vuelven estúpidas y crueles, porque no siguen la lógica de las Escrituras, sino lo que ellas piensan que dicen las Escrituras...
Y lo ilustraba con una parábola:
El herrero del pueblo contrató a un aprendiz dispuesto a trabajar duro por poco dinero, y se puso a instruirlo:
-Cuando yo saque la pieza del fuego, la pondré sobre el yunque; y cuando te haga una señal con la cabeza, golpéala con el martillo.
El aprendiz hizo exactamente lo que creia que le habían dicho, y al día siguiente se había convertido en el nuevo herrero del pueblo"
miércoles, 5 de marzo de 2008
Amigos....
Claro, siempre los contamos, siempre decimos tener muchos, siempre estan ahi en las buenas... pero, que garra hermano!, que fuerza !, que alegría, cuando tenemos al lado nuestro a esos, que a pesar de que nos dicen lo que no nos gusta, o simplemente lo que no pensamos... nos lo dicen, en un acto de Amor supremo, que vale mas que cualquier otra cosa... esos que te dicen... "si no te lo digo... no soy tu amigo" y los codigos se establecen en un mismo plano, y se desdibuja cualquier sentimiento negativo, y el único que se puede ver es el del Amor puro y sano.
A esos amigos, que saben ellos mismos quienes son, y que no vale, por su propio estilo el nombrarlos, mis mas sinceras Gracias !.
Mas abajo, estan estas palabras... Es la ley de la vida que cada vez que se nos cierra una puerta, se nos abre otra. Lo malo es que con frecuencia miramos con demasiado ahínco hacia el pasado y añoramos la puerta cerrada con tanto afán, que no vemos la que se acaba de abrir.
Albert Schweitzer.
Eso lo saco de un Libro que me presta una de esas Amigas de las que estoy hablando, y que se relaciona directamente con los dichos por un Amigo del alma, que me dijo exactamente lo mismo, abriendome la puerta... y MOSTRANDOME que ahí estaba abierta y que dejara de mirar para atras.
Claro, siempre los contamos, siempre decimos tener muchos, siempre estan ahi en las buenas... pero, que garra hermano!, que fuerza !, que alegría, cuando tenemos al lado nuestro a esos, que a pesar de que nos dicen lo que no nos gusta, o simplemente lo que no pensamos... nos lo dicen, en un acto de Amor supremo, que vale mas que cualquier otra cosa... esos que te dicen... "si no te lo digo... no soy tu amigo" y los codigos se establecen en un mismo plano, y se desdibuja cualquier sentimiento negativo, y el único que se puede ver es el del Amor puro y sano.
A esos amigos, que saben ellos mismos quienes son, y que no vale, por su propio estilo el nombrarlos, mis mas sinceras Gracias !.
Mas abajo, estan estas palabras... Es la ley de la vida que cada vez que se nos cierra una puerta, se nos abre otra. Lo malo es que con frecuencia miramos con demasiado ahínco hacia el pasado y añoramos la puerta cerrada con tanto afán, que no vemos la que se acaba de abrir.
Albert Schweitzer.
Eso lo saco de un Libro que me presta una de esas Amigas de las que estoy hablando, y que se relaciona directamente con los dichos por un Amigo del alma, que me dijo exactamente lo mismo, abriendome la puerta... y MOSTRANDOME que ahí estaba abierta y que dejara de mirar para atras.
Suscribirse a:
Entradas (Atom)